THE WORLD RADIO MISSIONARY FELLOWSHIP MÁS DE 90 AÑOS AL SERVICIO DEL ECUADOR

¿Por qué no recibimos más cartas?

Escuchar audio en español:

Why don’t we get more letters?

Listen to audio in english:


En las primeras difusiones de HCJB en japonés se usaban programas grabados por Kazuo Ozaki y la Pacific Broadcasting Association, en Japón, pero se descubrió que algunas de esas cintas salieron al aire al revés; así que Kazuo e Hisako Ozaki vinieron a Quito, en Mayo de 1964, y empezaron a producir programas en japonés. 

Por 1970, los Ozaki estaban desanimados por el número de cartas que recibían de los oyentes. 

En 1972, 4.301 cartas. 

Kazuo clamó a Dios preguntando: “¿Por qué no recibimos más cartas?”

Las cartas empezaron a llegar.

1974 – 19.972 cartas. 

1975 – 48.141 cartas.

1976 – 63.416 cartas. 

Kazuo recuerda que se sintió abrumado con toda la correspondencia que había recibido. Así que clamó a Dios diciendo: “¡detén el envio de tantas cartas!” 

¿Qué ocasionó el repentino interés en los programas de HCJB en japonés? 

Una de las más grandes fábricas de radios en Japón, anunciaba su nueva radio fue capaz de receptar programas en japonés desde estaciones del otro lado del mundo, como HCJB en Quito-Ecuador. La foto de la radio en la revista advertía de forma especial, la frecuencia de las difusiones de HCJB en japonés.


HCJB’s first Japanese broadcasts used recorded programs sent from Japan by Kazuo Ozaki and the Pacific Broadcasting Association. Before long, it was discovered that some of those tapes were being played backwards. So Kazuo and Hisako Ozaki moved to Quito where they began making Japanese programs in May 1964. 

By the 1970s, the Ozakis were discouraged by the number of letters they got from listeners. 

1972 – 4,301 letters. 

Kazuo cried out to God asking. “Why don’t we get more letters?” 

The letters began to arrive.

1974 – 19,972 letters.

1975 – 48,141 letters.

1976 – 63,416 letters.

Kazuo recalled how he felt overwhelmed with all of the mail they needed to respond to. He cried out to God, “Stop sending us so many letters.” 

What caused the sudden interest in HCJB’s Japanese programs? 

One of Japan’s largest radio manufacturers began advertising that their new shortwave radio could receive Japanese programs from stations on the other side of the world, such as HCJB in Quito, Ecuador. The radio pictured in the magazine ads prominently displayed the frequency of HCJB’s Japanese broadcasts.